sábado, 9 de octubre de 2021

Excursión X302: Castillo Mayor

FICHA
 TÉCNICA
Inicio: Puértolas
Final: Puértolas
Tiempo: 5 a 6 horas
Distancia: 14 Km
Desnivel [+]: 568 m
Desnivel [--]: 568 m
Tipo: Circular
Dificultad: Media
Pozas/Agua: No/No
Ciclable: No
Valoración: 4,5
Participantes: 7

MAPAS 
* Mapas de localización y 3D de la ruta

















PERFIL
* Perfil, alturas y distancias de la ruta













TRACK
Track de la ruta (archivo gpx)

PANORÁMICA 3D GOOGLE EARTH

RUTA EN RELIVE
Ver esta ruta en Relive

RESUMEN
Para nuestro tercer día por Huesca, Juan nos tenía preparada una ruta muy pirenaica y con excelentes vistas, subir al Castillo Mayor desde Puértolas.

Ese impresionante macizo flanquea una de las entradas al Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, quizás la menos conocida. Su nombre hace referencia a su orografía, marcada por unos imponentes cortados verticales y su planta redondeada, que recuerda un recinto medieval amurallado gigantesco.

Su acceso más cómodo se hace desde las afueras de Puértolas, donde estacionamos después de recorrer unos 7 km desde el hotel Arnal de Escalona, donde nos hospedábamos.

Dejamos los coches en la bifurcación de la carretera que hay medio kilómetro después del pueblo de Puértolas. Por la izquierda se va a Bestué y por la derecha a Escuaín.

Iniciamos el ascenso en dirección noroeste con la mirada puesta en nuestro objetivo, que desde aquí nos parecía ciertamente un castillo inexpugnable con el aspecto de un amplio embudo en forma de "V".

Unos cien metros por la carretera de Bestué dieron paso a un camino por senda, a la derecha de la carretera, señalizada por un una flecha de madera y un cartel en el que se indicaba Castillo Mayor 2h 30´. El recorrido, aunque zigzagueante a ratos, está perfectamente marcado.

Un muro de piedra delimita la primera parte del recorrido, que discurre entre robles y boj, y en el que también vimos setas.

Al sobrepasar la zona conocida como El Estacho, la vegetación se aclara y al llegar a La Plana, disfrutamos de unas estupendas vistas del valle, con las casas de piedra y la torre de la iglesia de Bestué asomada a los profundos barrancos que la rodean.

La senda vuelve a emboscarse al rebasar el Prado del Cura y tras varias zetas, desciende ligeramente hacia el valle colgado de los Llanos, una inmensa dolina herbosa, de aproximadamente 1'5 Km de largo por 0'5 Km de ancho, con restos de aljibes, en los que casi todo el año puede encontrarse algo de agua estancada, procedente de la fusión de las nieves del Castillo Mayor. La hierba que cubre todo el llano aún está verde y le da una tonalidad fantástica al paisaje.

Geológicamente, es muy interesante esta formación, por tratarse de un sinclinal colgado, una isla tectónica (o estructura en mantos de cabalgamiento, "klippe" en alemán) en la que inmensas masas de calizas han sido arrastradas sobre margas más recientes y más erosionables.

Desde el Llano se ven muy claros dos posibles senderos, uno que sube recto hacia la cima donde está situado el vértice geodésico y otro hacia la derecha, en busca de un collado que permite luego recorrer parte de la cresta hasta llegar a la cima. Elegimos subir por el segundo y descender por el primero.

Bordeamos los aljibes y nos dirigimos, en cómodo paseo y con suave pendiente hacia el collado, situado en el extremo oriental del Castillo, desde el que queda un estupendo mirador con impresionantes vistas hacia el valle del Cinca.

Los cortados que desde aquí se tienen, corresponden a la cara noreste del Castillo, muy vertical y abrupta, en donde anidan quebrantahuesos, buitres y águilas aprovechando sus oquedades.

A la izquierda divisamos la cresta que hemos de recorrer, hacia el noroeste, para llegar a la cima. Con precaución vamos remontamos el lapiaz siempre cerca de la cresta, asomándonos de vez en cuando al abismo de sus precipicios.

No hay senda definida y solo apenas unos hitos ayudan a progresar por el incómodo lapiaz, entre rocas muy grandes, con bordes cortantes y agujeros entre ellas rellenos con bojes.

Estamos en una zona kárstica, con un laberinto de rocas calizas que tienen profundas hendiduras que hay que saltar o rodear y en donde hay que prestar mucha atención para evitar tropiezos y caídas. Con nieve este tramo puede ser peligroso.

Por fin llegamos al vértice geodésico en la cima, situado a 2.013 metros de altura.

Las vistas desde aquí eran espectaculares. Se divisan las Tres Marias, Cañon de Añisclo y las Tres Sorores. También la garganta de Escuain el sector de los Sestrales y más lejos al Oeste la Sierra Tendeñera y al Oriente los macizos de Posets, Maladetas y Cotiella.

Tras un breve descanso, tocaba continuar. Había dos posibilidades, descender directos hacia El Llano o seguir por la cresta hasta alcanzar la Peña LÓmbre, en el extremo occidental del Castillo, que era lo previsto.

Nos sacó de dudas un montañero que venía de allí al decirnos que no merecía la pena ir hasta el otro extremo porque las vistas son las mismas que las que teníamos aquí y avanzar por la cresta era muy complicado. De todas formas, es esa la ruta que documentamos aquí.

En consecuencia, decidimos bajar desde el vértice geodésico siguiendo las marcas que señalan la vía más directa de descenso hacia el Llano. El descenso, en dirección suroeste, es rápido y sin grandes problemas, con abundantes hitos de piedra que indican bien el camino.

Cuando llegamos a la pradera, paramos a tomarnos los bocadillos y descansar un poco con tan agradable panorámica, que invitaba a quedarse allí durante toda la tarde.

Tras el descanso, continuamos hacia el aljibe y conectamos con el sendero que antes habíamos utilizado para subir, hasta llegar de nuevo a la carretera donde habíamos dejado los coches.

Las cervezas de fin de ruta nos las tomamos en un bar de Santa María, unas pocas casas situadas a las afueras de Puértolas.

Su terraza tiene un mirador único hacia la Peña Montañesa y la Sierra Ferrera, dando así por finalizada esta corta ruta pero con elevado desnivel, que tiene como mayor atractivo sus peculiaridades geológicas y estupendas vistas, añadidas al panorama de 360º desde la cima, que la hacen merecedora de 4,5 estrellas.
Paco Nieto

No hay comentarios:

Publicar un comentario