domingo, 11 de septiembre de 2011

Excursión X016: El Chorro de Navafría

FICHA TÉCNICA
Inicio: El Chorro de Navafría

Final: El Chorro de Navafría
Tiempo: 1 a 2 horas
Distancia: 4,1 Km 
Desnivel [+]: 164 m 
Desnivel [--]: 164 m 
Tipo: Circular
Dificultad: Baja
Pozas y agua: Sí
Ciclable: Sí
Valoración: 3
Participantes: 6

MAPAS 
* Mapas de localización y 3D de la ruta





















PERFIL

* Perfil, alturas y distancias de la ruta














TRACK

PANORÁMICA 3D GOOGLE EARTH

RESUMEN
Aprovechando el buen tiempo, nos acercamos a este paraíso veraniego que es el Chorro de Navafría, lugar donde el ocio se lleva bien con la naturaleza y uno de los pocos lugares donde se pueden utilizar las parrillas, eso si no hay viento. 

Con la intención de disfrutar una buena sardinada y unas chuletas tras un paseo al chorro.

Damos los primeros pasos en dirección al bar restaurante que está situado frente al aparcamiento, continuando hacia el laberinto que se encuentra al lado, una curiosa construcción hecha con troncos de pinos por los que hay que buscar la salida. 

Superada la prueba, continuamos hacia el pequeño refugio, situado al comienzo de la senda que asciende junto al arroyo del Chorro, que pocos metros más abajo entrega sus aguas al río Cega, y que unos pocos más arriba se precipita estruendoso por una fascinante chorrera. 

La subida es cómoda por la ancha pista, bajo gigantescos pinos, con el sonido constante del agua a nuestra izquierda y con incluso bancos en los que descansar o simplemente contemplar el paisaje. Recorrido poco menos de un kilómetro, alcanzamos una fuente de fresca agua a poco de llegar a la cascada. 

El espectáculo desde el puente de madera que precede el gran salto de agua es grandioso, ésta desciende en una trayectoria recta a más de 20 metros y con una inclinación bastante constante. La anchura de la cascada es también muy uniforme, por lo que su forma se asemeja mucho a la de un tobogán. 

Por una escalera de piedra que sale a la derecha, ascendimos al mirador que hay en la parte alta de la cascada, desde donde se precipita el agua en su último tramo. Desde allí las vistas son espectaculares, con amplia visión del valle que forma el río Cega en su camino hacia el Duero, y a nuestros pies, la pequeña poza donde las aguas del chorro descansan antes de seguir por el arroyo. 

En ella nos mojamos los pies, que a esta altura del año no apetece más, máxime en estas aguas, las más gélidas que conozco. Con todo, hay algún valiente que se da una ducha, eso sí, rapidita. Las fotos seguro que no hacen justicia a la magia de este privilegiado rincón. 

Tras deleitarnos con el constante murmullo del agua, retomamos la marcha, cruzando el puente para continuar por la senda que lentamente asciende en dirección noreste al encuentro de la pista que viene de la parte alta del valle y que de seguirla se puede llegar incluso al puerto de Navafría. 

Nosotros la seguimos por la izquierda para descender en dirección norte hasta conectar, tras una gran curva con la carretera que une el área recreativa con el pueblo de Navafría.

Allí cruzamos la mencionada carretera y nos dirigimos hacia las piscinas naturales que en esta época estaban sin agua. 

El punto final superó las expectativas, no hay nada como unas buenas cervezas fresquitas y el olor a sardinas y chuletas para reponerse tras una caminata, aunque ésta no ha sido muy larga, pero que bien se merece 3 estrellas.
Paco Nieto

No hay comentarios:

Publicar un comentario